jueves, 17 de septiembre de 2009

VIDEO. ADIÓS BEIJING.

Las últimas impresiones en la Universidad de Estudios Internacionales de Beijing.

sábado, 12 de septiembre de 2009

VIDEOS DEL TIBET

Un poco de esa emoción, del ambiente sonoro , una experiencia que considero un privilegio en mi vida. Un viaje que justifica cualquier dificultad que uno pueda pasar para sobrevivir en China. Fue, en realidad , el mejor corolario que hubiera podido tener mi estancia en el gran país asiático.


Todos los creyentes dan vueltas alrededor de sus lugares sagrados en el sentido de las manecillas del reloj. La actitud de entrega , fe e introspección crea una atmósfera inolvidable.

Estas imágenes de profunda fe fueron grabadas frente a la entrada principal del templo Yokhang, el más importante centro del budismo tibetano.

Un convoy de militares chinos en la carretera hacia el lago Namtso. Los turistas nacionales los vitorean.

lunes, 7 de septiembre de 2009

TIBET FASCINANTE.

Una disculpa a mis lectores por escribir hasta ahora .


Ya saben cómo la cotidianedad engulle a los seres humanos . Y en época de crisis ( que recuerdo oír hablar de ello desde que tengo uso de los sentidos del oído y de la razón) se tiene que trabajar arduamente.


Sin embargo , estoy feliz de haber regresado a México y a mi Oaxaca incomparable, no dejo de gozar el cielo y los colores de México.


En momentos recuerdo como un lindo sueño la experiencia en China , y cuando reviso las imágenes que registré , vuelvo a sentir , sobre todo rememorando al Tíbet, la profundidad de un pueblo sabio y místico, como el México profundo.


A los que me han regañado de que pongo mucho texto y pocas imágenes , los complazco hoy.


Hé aquí otras imágenes del Tíbet.

Dispensador de oxígeno en el tren de Beijing a Lhasa. Cuando el ferrocarril asciende a más de 3,000 mts sobre el nivel del mar, el mecanismo comienza a proveer de oxígeno a los viajantes para impedir que haya afecciones a la salud. Hay un tunel en el camino que está a 5,000 mts sobre el nivel del mar. Toda una experiencia.
Enorme y bellísimo lago en la provincia de Qinhai , aledaña al Tibet. El tren tarda media hora en recorrerlo todo cuando pasa a su orilla. El efecto de espejo que tiene este lago es increíble ... e inspirador.







La estación del tren en Lhasa está fuertemente custodiada por elementos del ejército chino. Nadie puede permanecer en la explanada, no hay sanitarios en el interior ni servicios de alimentos y bebidas. Los tour operadores reciben a los turistas más allá de la barrera metálica que se ve en primer plano.En el recibimiento se prefigura el ambiente que permea en todo el Tibet.

El Río de Lhasa aparece en el paisaje a punto de terminar el viaje de 48 horas en ferrocarril desde Beijing.



El Potala Blanco, la parte administrativa del palacio del Dalai Lama. Una vez entrando a esta parte del recorrido , se prohibe terminante tomar fotografías. Los tesoros más impresionantes están custodiados aquí , entre otros , las tumbas de los Dalai Lamas del quinto hasta el décimo tercero, y es únicamente la memoria de los turistas la que guardará los detalles de la visita.



El umbral del Potala. Columnas de madera, paredes de estuco con intrincados murales. Guardianes en lo alto de la puerta. Un sueño de muchos años hecho realidad: Franquear la entrada del palacio más importante del Tibet.


Mujer limpiando las ruedas de oración. Lo hace constantemente , como corresponde tratar estos objetos de uso ritual.



Haciendo girar continuamente las ruedas de oración. Estas mujeres me recordaron vivamente a las mujeres mixes o ayuuk de Oaxaca.




Mujeres caminando alrededor del Potala. La diversidad en la indumentaria y el colorido de ésta es sumamente atractivo.Pero lo más sobresaliente es la atmósfera de recogimiento y fe que se respira en el ambiente.


Una mujer haciendo oración ante una de las representaciones de Buda en la pared posterior del palacio del Potla. La barda del Potala está llena de pinturas y relieves que muestran distintos emblemas budistas. Algunos de ellos tienen ofrendas sencillas, como agua, frutas y hasta maíz.



En el interior del templo Yokhang aún se puede apreciar el trono desde donde el Dalai Lama presidía las principales ceremonias que marca el calendario ritual tibetano.



La calle Bakhor está fuertemente orientada al turismo. Los puestos ahí instalados ofrecen toda suerte artesanías y objetos , algunos de ellos relacionados con el budismo.




En la calle Bakhor los fieles budistas, de acuerdo a sus creencias, se mueven en la dirección de las manecillas del reloj. Los soldados, fuertemente armados , lo hacen en el sentido contrario.



A la entrada de la calle Bakhor, en las afueras del famoso templo Yokhang, algunos monjes deambulan. Al fondo podemos ver la presencia militar china que es una constante en este territorio.




Personas en oración postradas a la entrada del templo Yokhang.Los orantes vienen de regiones diversas del Tíbet , algunas de ellas bastante remotas. Al fondo los turistas obtienen inolvidables imágenes.



Desde el techo del templo Yokhang , el más importante del budismo tibetano. Al fondo se ve el palacio del Potala.












Niños a la orilla del lago Namtso ,disputando por la posesión de un billete. El lago es el más alto del mundo a 4,770 metros sobre el nivel del mar.



Un alto en el camino a 5,111 metros sobre el nivel del mar. Desde luego , este punto geográfico es un lugar sagrado para los buidstas tibetanos.


Una construcción tradicional a la vera del camino en plena meseta tibetana.


A orillas del lago Namtso . Una montaña con banderitas de petición.

Los camiones militares chinos pasan frecuentemente en las carreteras tibetanas en caravanas numerosas. El ambiente de ocupación se siente en todo momento. Los turistas chinos toman fotos y les aplauden, al mismo tiempo tratan de evitar que los extranjeros tomemos fotos o hagamos video.


El lazo sin fin. Represente el movimiento infinito del universo y sus facetas brillante y oscura. Buen símbolo para cerrar esta serie de fotos.

miércoles, 22 de julio de 2009

LA CARTITA DE DESPEDIDA.

Éste es el último mail que mandé desde la computadora de mi apartamento a mis seres queridos. Justo antes de partir a México.
Se los comparto.

Hola a tod@s:

Éste es mi último día en China y el último momento de uso de esta computadora de la Universidad.Han pasado diez meses con veintidos días de una experiencia que ha marcado mi vida. Una oportunidad única de donde saco una cosecha que estoy seguro , con decisión, talento y honestidad, podrá ser compartida con la gente que me rodea.Mil gracias a los que estuvieron conmigo y a los que se ausentaron, mil gracias por las palabras de aliento y por la confianza. POr la visita de Laura ,Jeff y Diego, por las cartitas de cariño, por la curiosidad de saber cómo es este país.Mil gracias por cuidar de la casa, por compartir las penas y las alegrías.Mis ojos están aún plenos de imágenes. He visto a las multitudes en las calles, los Budas enormes y micróscopicos en cuevas, las minas que todo lo ensucian ,los rascacielos, los templos, los paisajes, los peregrinos y el techo del mundo. ¿Qué más se podría pedir?este viaje también ha sido una inmersión al mundo interior y salgo conmuchas enseñanzas. Espero platicar con ustedes infinidad de cosas.Mientras tanto les envío un abrazo y todo mi cariño.


Rodrigo.

VIAJE REVELADOR EN EL TECHO DEL MUNDO

A la estación del tren llego con Fernando, uno de mis alumnos. Está conmigo porque no puedo ir al Tibet sin permiso del gobierno chino, además lo debo hacer en grupo. Después de esperar al representante de la agencia de viajes y recoger los boletos junto con el tan ansiado permiso , parto, en un convoy especial , provisto de dispensadores de oxígeno. Voy a atravesar China casi de un extremo a otro. Me esperan 48 horas en el tren. La gran aventura entre Beijing y Lhasa comienza. Estoy a la expectativa de paisajes insólitos, ciudades antiguas, desiertos y lagos, para ,al final , llegar a la meseta tibetana; la más elevada del planeta.

EL LARGO CAMINO.

Primero, Fernando compra un pase de abordar con el costo de dos pesos mexicanos para dejarme instalado en mi vagón. A estas alturas ya sé que mi tour incluye a dos colombianos, dos rusos, cuatro filipinos y dos residentes canadienses. También viajan muchos chinos.
Cuando el tren parte pasan frente a mis ojos una infinidad de imágenes . Siento que llegamos muy rápidamente a Xi´an, la antiquísima capital de la primera dinastía china. Al igual que en las siguientes paradas ,el tren sólo se detendrá unos cuantos minutos.
La verdadera aventura comienza cuando llegamos a la ciudad de Golmud, en la provincia de Qinghai , en la última recta de 1000 kilómetros para llegar a Lhasa.
Ahí pasan los oficiales con formularios en los que los pasajeros se responsabilizan de efectuar un viaje a una altura mayor a 3,000 metros sobre el nivel del mar.
La vía férrea ha sido construida con una tecnología única. Pasa a través de inacabables estepas, cubiertas de pastizales, no hay árboles. De pronto, aparece un enorme lago color turquesa que el tren tarda media hora en dejar de bordear.
Es de madrugada cuando empezamos el ascenso.El tren está ya en el Tibet. Hago enorme esfuerzo para mantenerme despierto, no me quiero perder nada de esta experiencia que siento única desde este momento.
Nos esperan túneles larguísimos , uno de ellos está situado a cinco mil metros de altura.El oxígeno comienza a salir de los tubos ubicados en las paredes del vagón, mientras el día avanza y se divisan antílopes, yaks, águilas, rebaños de ovejas, y más allá , la portentosa naturaleza.La no intervención del hombre.
Montañas, hermosas, de bellos colores, a veces cubiertas de verde , a veces dejando ver lo rojizo de su suelo. En la lejanía hay elevaciones moradas ,cubiertas de nieve. Y arriba, el indescriptible y profundo cielo, surcado de unas nubes que pareciera que es posible tocar. Cúmulos , cirros , nimbos, y el zafir encantador . Prometo no repetirlo aunque caiga en la tentación cada vez que recuerde el cielo tibetano: este cielo es igual al de Oaxaca.
Aunque por horas sólo se contempla el lejano horizonte , por momentos es posible ver rebaños , pastores y pueblos ; algunos son minúsculas aldeas , otros tienen una dimensión más extensa, pero lo que resalta siempre es el soberbio paisaje. Me pregunto todo el tiempo ¿Cómo crecerá esta gente en un entorno tan grandioso? Sé que las condiciones de vida son duras y que los últimos sesenta años han visto una tragedia enorme en este lugar, pero aún así vivir aquí debe ser una cosa única por la belleza la tierra.
Ya en el valle de Lhasa veo fábricas, alguna familia de día de campo en una de las escasas arboledas que existen en este lugar. La altura es tal , que es imposible que crezcan bosques , las montañas son rocosas, desnudas de vegetación.

Una exclamación sale del vagón cuando pasamos en un puente férreo y alguien avisa que , a nuestra izquierda se divisa el Potala. Sí , el Palacio del Dalai Lama. Me froto los ojos , se me hace un nudo en la garganta, guardo silencio mientras un macizo rocoso tapa el espejismo que acabo de ver. Es el 11 de julio del 2009 aproximadamente a las siete de la noche. Nunca lo olvidaré.


EL PALACIO DEL POTALA.

DATOS.
AÑO DE CONSTRUCCIÓN: SIGLO VII , AMPLIADO EN EL SIGLO XVII.
ALTURA: 115.7 mts.
PERSONAJES INVOLUCRADOS: SONGTSAN GAMPO: FUNDADOR. V DALAI LAMA: IMPULSOR DE LA AMPLIACIÓN.

Para visitar el Potala es necesario reservar la entrada con dos semanas de anticipación. Sólo así es posible satisfacer la demanda de los miles de turistas que viajan hasta acá , atraídos por el magnetismo de una nación que fue hasta 1959 una teocracia, donde su rey además de sumo pontífice y jefe de estado también era considerado una de las reencarnaciones de Buda.
Al llegar en el autobús a la entrada oriente del Palacio veo a los peregrinos que caminan en el sentido de las manecillas del reloj , girando sus ruedas de oración . No hay tiempo para detenerse a tomar fotos. Tenemos solo una hora para hacer la visita, desde luego , quedaremos insatisfechos.
Después de pasar por el severo control de seguridad donde retiran botellas de agua y otros recipientes que contengan líquidos empieza la ansiedad por ver con los ojos muy abiertos los tesoros que aún quedan en el monumento.
El Potala se divide en la sección blanca y la sección roja. La primera cumplió funciones administrativas , mientras que la segunda fue la sede religiosa más importante del budismo tibetano. En las áreas al aire libre durante el ascenso en la larga escalinata es posible presenciar vistas inolvidables de Lhasa y ver a los tibetanos que vienen de regiones remotas y se toman la foto del recuerdo.
Pero una vez que uno entra en el recinto las cosas cambian.
La brusquedad característica de los guardias chinos aquí se acentúa más. No permiten que la gente se detenga un solo momento en las salas que contienen elementos dignos de ser admirados y contemplados con asombro. Tomar fotografías está prohibido y la atmósfera de intimidación le resta mucho a lo que podría ser una experiencia interior riquísima. A pesar de los gritos de los guardias no dejé de disfrutar la presencia y el místico murmullo los de peregrinos orando mientras visitaban un recinto sagrado para ellos.
Los murales son notables, desde aquéllos que muestran los guardianes mágicos del sitio , hasta los que representan a la ciudad santa de Lhasa y otros más con símbolos del budismo que son más difíciles de entender para los que no estamos versados en esta filosofía espiritual.
Si a eso le agregamos que el guía encargado de la visita en realidad denotaba su poco conocimiento sobre la materia (o su aburrimiento ante una visita para él cotidiana) pues, la atención resultaba pobre. En general, en toda China los servicios turísticos son cuando menos, mediocres, y muchas veces voraces y hasta fraudulentos.
A pesar de todo ello no deja de ser emocionante ver el recinto donde el Dalai Lama se reunía con sus funcionarios, y también la sala de estudio, así como el lugar donde se leía el oráculo.
Después de cruzar una terraza entramos al Potala rojo. Ahí vimos las tumbas en forma de Stupa del V al XIII Dalai Lama. Las tumbas ostentan láminas de oro y plata, y están cuajadas de esmeraldas, turquesas , corales, diamantes y otras piedras preciosas. Abundan los retratos del XIII Dalai Lama, porque los retratos del depuesto XIV Dalai Lama, el que todos conocemos y que encabeza el gobierno tibetano en el exilio, están prohibidos. También es ilegal desplegar la bandera tibetana.
La biblioteca es impresionante. Paredes enormes tapizadas de libros que milagrosamente se salvaron de la Revolución Cultural proclamada por Mao Zedong entre 1967 y que pretendían desaparecer los valores de las culturas tradicionales de los territorios de lo que hoy conocemos como China. Y ahí están, esos libros en escritura tibetana, que es afín al sánscrito.
En otra sala hay una representación de Songtsan Gampo , quien además de iniciar la construcción del Palacio en el siglo VII también ordena que se levante el templo Yokhang , que es el más importante del culto budista tibetano. Este personaje también es el fundador de la secta conocida como ¨ del gorro amarillo¨.
La visita dura solo una hora , y al salir , uno queda con la certeza de que muchos tesoros del Potala no nos son mostrados. Al salir aún quedan pegadas en mis ojos las imágenes de los grandes calderos de grasa en donde arden velas, de las ofrendas de dinero que la gente deja en su apresurado paso ,del corazón del Potala Rojo, un centro de oración en donde se estaban restaurando los enormes pendones de tela .
La circulación se agolpa en las venas y no es únicamente por lo difícil que es subir escaleras a 3,650 metros sobre el nivel del mar a escasas catorce horas de haber llegado al techo del mundo.

LA LUZ DEL TIBET.

FRENTE AL TEMPLO YOKHANG . LA FE , QUE NO MUERE.

PEREGRINOS HACIENDO ORACIÓN AL FRENTE DEL TEMPLO YOKHANG.


ESCALERA HACIA EL POTALA.AL FONDO , LAS MONTAÑAS DE LHASA.


EL POTALA. CENTRO DEL PODER POLÍTICO Y RELIGIOSO. RESIDENCIA DEL DALAI LAMA.





INTERIOR DEL TEMPLO YOKHANG.

VIDEOS DE XINJIANG

Kashgar yTurpan son dos lugares que a la gente de hemisferios lejanos nos evocan fantasías del desierto a mitad de la ruta de la seda, de ciudades oasis y pueblos que profesan el Islam.
Aquí les comparto dos pequeños momentos.




Este es el mercado de la ciudad de Turpan. La más baja de China ( 250 metros bajo el nivel del mar) y la que llega a las temperaturas más altas en el verano ( 50 grados centígrados).


Esta es la mezquita Id Adkha en la impresionante ciudad de Kashgar, el centro urbano más occidental de China. La etnia Uygur habla una lengua túrquica y son descendientes de ese grupo humano . La ciudad tiene ya el profundo sabor de los asentamientos del Asia Central. Es una verdadera alucinación.




Pero como se pueden dar cuenta ,no todo es hermoso. La destrucción del centro histórico de Kashgar en aras de un proyecto de modernización pone en riesgo de extinción al ,hasta ahora,mejor conservado ejemplo de ciudad islámica en el Asia Central. Los viajeros que vayan en el corto plazo serán los últimos en disfrutar este hábitat lleno de originalidad de un pueblo que ha visto frecuentes agresiones asu patrimonio cultural.