martes, 23 de diciembre de 2008

SHANGHAI



Shanghai es una ciudad dínámica y muy activa; se trata , nada menos , que del motor económico de China. Llegar ahí en diciembre , aunque sea por unos días y sentir su atmósfera cosmopolita ha sido una gran experiencia.


Esta urbe estuvo desde el siglo XIX en la mira de las portencias europeas, por ser un enclave fundamental para el comercio entre la parte continental de China , los países vecinos y aún algunas naciones distantes.


Como visitante de corto tiempo quedé asombrado de los contrastes en esta urbe donde la opulencia y la modernidad se tocan con formas tradicionales de conviviencia y la carencia de recursos.




Una rápida vista al malecón de Shanghai


Adentrarse un poco en sus céntricas calles nos lleva a un mundo de contrastes. Junto a las sucursales de poderosos bancos y tiendas transnacionales, el lujo de sus plazas y la mezcla de estilos en su arquitectura ( que va desde el colonial europeo hasta lo más contemporáneo) podemos ver barrios donde el hacinamiento y la lucha por la vida diaria se manifiestan. Sí , se aprecian estampas muy ¨pintorescas¨que impresionan al turista, pero en esta realidad se concreta la voracidad de la globalización que arrasa con lo antiguo y todos sus contenidos ( buenos y malos) y construye otras cosas.


Shanghai ha sido una estampa viviente del crecimiento desigual de una sociedad, cosa que no deja de tener una tremenda belleza. Atravesar de pronto, una callecita como la que les muestro a continuación es como asistir a la agonía de una forma tradicional de vida que , tal vez , sólo pueda tener en el turismo una tabla de salvación, con sus consabidos costos.




martes, 16 de diciembre de 2008

LA COLINA DE CARBÓN.

El prmer pabellón que uno se encuentra al acceder por la entrada sur. Arriba se ve el templo que coronala colina de carbón.

Entre los árboles se perfilanlos tejados del palacio imperial.




Vista de la ciudad prohibida desde la colina de carbón.







Vistiendo al emperador fake, con ropa rentada.










Ellos no son súbditos ni emperador y emperatriz, son turistas.









Vista del pabellón en el acceso norte. Más allá el Beijing contemporáneo.











Desde la cima se ve la stuppa budista conocida popularmente como ¨la pagoda blanca¨ que domina el lago de Beihai.








Solo la base existe. La figura de Buda fue sustraída en la invasión de las ocho potencias occidentales en 1900.









Yo , de turista. No puede uno resistirse a esas tentaciones fotográficas












Pabellón saqueado.







El árbol.
















Algo de historia de esta colina: Un emperador se suicidió en este árbol.














Vista privilegiada de Beijing desde la Colina de Carbón.

lunes, 8 de diciembre de 2008

TEATRO EN LA UNIVERSIDAD DE ESTUDIOS INTERNACIONALES DE BEIJING

Una grata sopresa: La presentación de una adaptación de ¨La posadera ¨de Carlo Goldoni en el Auditorio de la Universidad de Estudios Internacionales de Beijing. Fue una delicia principalmente porque el público estaba fascinado por la historia y las actuaciones de los jóvenes estudiantes de lenguas extranjeras; la audiencia festejaba cada chiste , aplaudía entre escena y escena y estaba entregada a la ficción teatral.

El título de la adaptación era ¨ Sexo y Política¨ , la puesta era bastante amateur, con una escenografía a todas luces improvisada por No profesionales del espacio escénico.

¿DE QUÉ SE TRATA ¨LA POSADERA ¨?

Carlo Goldoni, dramaturgo veneciano nacido en el siglo XVIII escribió esta obra, en ella presenta personajes variopintos que se encuentran en la posada de Mirandolina, la posadera, una mujer que sabe utilizar a la perfección sus armas de seducción para conquistar a caballeros de diversa índole. Conquistas amorosas que sólo sirven para que la posadera se regocije de su poder que no es más que la libertad y la independencia.
Personajes como el marqués arruinado, el conde rico, el caballero misógino y el criado, luchan por los amores de la posadera, cada uno con sus propias armas y artificios, que no demuestran sino la decadencia de una aristocracia que de pronto es infravalorada, y que en la obra de Goldoni se muestra con un punto humorístico que resta gravedad al asunto.
Los enredos empiezan en la posada con la llegada de dos comediantas que se hacen pasar por damas y se mofan de esta aristocracia. Lo mismo hace, aunque a su manera, Mirandolina, quien se marca el reto de conquistar al caballero misógino, que desprecia a todas las mujeres. Aunque los trucos de la posadera consiguen que caiga el misógino a sus pies, éste es incapaz de reconocerlo por su estatus social, algo que desenmascara la posadera delante de todos..
En su día , la aristocracia y burguesía decadente tacharon la obra de Goldoni como falta de ética.

En esta puesta en escena llamaron mi atención dos cosas: la selección de un texto europeo que habla de circunstancias sociales muy específicas ( la decadencia de la aristocracia y la burguesía en Europa ) y la interpretación en lengua china .

En cuanto al vestuario era curioso ver tanto color metálico y la caracterización con pelucas rubias o de color castaño claro en rostros asiáticos.

Les dejo una muestra:

Los criados y los señores conversando.

La posadera y las comediantes en escena

Criado y misógino

Las comediantes y los criados.

Las comediantes y el marqués a la mesa.

Comensales piden pizza.

sábado, 22 de noviembre de 2008

CIUDAD PROHIBIDA

Familia china tomándose la clásica foto.
Es obligatorio tomarse la foto en el acceso a la ciudad prohibida. Los visitantes chinos no pierdenla oportunidad de hacerlo.

Banderas ondeantes a la entrada de la ciudad prohibida.


Guardia frente a la monumental foto del ¨Gran Timonel¨ Mao Zedong.








Familia china descansando en las inmediaciones de la puerta meridiana.





La puerta meridiana.








Aldaba de bronce.



Ayer funcionarios y embajadores escrupulosamente registrados transitaban aquí; hoy lo hacen ríos de turistas.





Peldaños de mármol con motivos animales que sólo el emperador podía pisar.


Ayer y hoy. Más allá de las murallas de la ciudad prohibida se dibuja la silueta de los rascacielos de la actual ciudad de Beijing.



Uno de los incensarios de bronce que eran utilizados en las grandes ceremonias.



El reloj de sol nos recuerda que sólo el emperador tiene la facultad de regular el tiempo.


Una grulla de bronce.




La tortuga. Símbolo de longevidad.


Tradición y modernidad. Más alá de los tejados de la ciudad prohibida se dibuja la estructura metálica del gran teatro nacional.




Los chinos arremolinándose frente a la ¨estancia de la suprema armonía¨ para tomar una foto del trono real.


El artesonado del techo de la ¨estancia de la suprema armonía¨cobijaba sólo a reales personajes.


El trono en la ¨estancia de la suprema armonía¨. Ahi se coronaba a los emperadores.



A lo lejos la stuppa budista conocida como la pagoda blanca , en el cercano lago de Behai.


Una llave de bronce resguardando los secretos de una estancia.



¿Cuántas intrigas se fraguaron en esos corredores?




Uno de los muchos tronos que ahi se pueden apreciar.





Caldero de bronce para almacenar agua en caso de incendio.



Uno de los patios de la mítica ciudad prohibida.




Motivos florales en cerámica sobre el muro.


Exquisito trabajo de cerámica sobre el muro.





El león con la esfera en la garra derecha. El emperador y el mundo.



La leona. La emperatriz.




El cachorro en la garra de la leona. La emperatriz y su heredero.




Hermoso día de otoño para salir a disfrutar lo que sólo estaba reservado a las corte real.


Adultos en plenitud en convivencia en los jardines imperiales.




La ¨Estancia de la apreciación de las flores¨ en la cima de ¨ la colina de la elegancia acumulada¨.



Detalle de fuente en la colina de la ¨elegancia acumulada¨ del jardín imperial.




El decorado del techo de uno de los pabellones.




Árbol con la forma del caracter chino ¨ren¨ que significa gente, persona, pueblo.






Hermoso huésped en los reales jardines.



La balaustrada a unpabellón en los jardines del emperador






En el jardín imperial.